La piel

La piel es nuestra envoltura, nuestra consciencia y nuestra vida. La piel habla de nuestra relación afectiva y sensual con el otro y con nosotras mismas.
Habla de nuestra necesidad de protección y dice lo que nos desazona. A través de la piel expresamos nuestro deseo del otro y también el temor que sentimos ante él. En la piel mostramos nuestros fallos, lo que nos avergüenza, las cicatrices y las penas,
La piel habla del amor y de las heridas del amor.

La piel es identidad, relación, ambivalencia:

Identidad: Nuestra pies es nosotros mismos.

• Vida y muerte (nuestra envoltura, es el límite de nuestra existencia)
• Toma de conciencia, verdad (remonta a la superficie)
• Memoria (la piel conserva las huellas, las cicatrices)

Relación Permite el contacto, pero también protege y aísla.

• Fragilidad, demanda afectiva ( erotismos, caricias)
• Receptividad, sensibiidad (a flor de piel)
• Permite que se vea (el sufrimiento, la vergüenza y la pena)

Anvibalencia 

• Deseo y miedo (mediante la piel nos ponemos en contacto, la piel nos protege y nos aísla)
• Carencia de fronteras 

Nuestra envoltura se compone de tres capas, que del exterior al interior son las siguientes:

• Epidermis, constituida por células apiladas ricas en queratinas, sustancia que asegura la impermeabilidad de la piel.
• La dermis, tejido conjuntivo que asegura su elasticidad, su conservación y su suavidad.
• El tejido subcutáneo, un colchón de grasa que nos protege del frío y amortigua los golpes; por esta capa circulan los vasos sanguíneos que la alimentan. 

La piel además cumple con la función de eliminación, 

• Del fuego, por una parte, pues es sobre todo gracias a la piel que se regula la temperatura del cuerpo, evacuando o reteniendo las calorías.
• Del agua y las toxinas, por otra parte por medio del sudor, que viene a completar la eliminación renal.